¿Para qué sirve un tratamiento de conducto?

¿Para qué sirve un tratamiento de conducto? Infografía.

Cuando una caries profunda o un golpe afecta el interior del diente, puede estar en riesgo tu pieza dental. La Endodoncia o tratamiento de conducto sirve para eliminar la infección, aliviar el dolor y conservar piezas dentales que de otro modo tendrían que ser extraídas. Es una de las alternativas más conservadoras, seguras y efectivas para tratar infecciones profundas.

En este artículo te explicamos para qué sirve este procedimiento, por qué no deberías tenerle miedo y qué esperar antes y después del tratamiento.

¿Qué es y para qué sirve un tratamiento de conducto?

Es un tratamiento odontológico que se realiza cuando la pulpa dental (el tejido blando donde están los nervios y vasos sanguíneos) está inflamada, infectada o dañada de forma irreversible.

La endodoncia permite eliminar esa infección, limpiar los conductos radiculares y sellarlos, evitando su reaparición. Su objetivo es preservar el diente natural, evitando extracciones innecesarias.

“Cuando hay una infección dentro del diente, el cuerpo ya no puede resolverla por sí solo. La endodoncia permite tratar el problema de raíz, aliviar el dolor y salvar piezas que son irremplazables”, explica la Dra. Paula Pinto, especialista en Endodoncia de Clínica Aires.

¿Cuánto demora un tratamiento de conducto?

La duración depende del estado del diente y del número de raíces. En general, puede realizarse en una o dos sesiones, de aproximadamente 60 minutos cada una.

Gracias al uso de tecnología mecanizada, el tratamiento es más eficiente, menos invasivo y más predecible.

“Hay casos simples que resolvemos en una sola sesión. Pero si el diente está muy infectado, es mejor espaciarlo en dos etapas para asegurar una desinfección completa”, explica la Dra. Pinto.

¿El tratamiento de conducto duele?

Es una de las dudas más comunes… y también uno de los grandes mitos.

La realidad es que el tratamiento no duele. Lo que causa molestia es la infección previa que afecta el nervio dental, no el procedimiento en sí. Con anestesia local y técnicas modernas, la intervención es segura, precisa y bien tolerada.

“Algunas personas llegan con temor, pero se sorprenden al ver que el procedimiento es mucho más tranquilo de lo que imaginaban. En la mayoría de los casos, el alivio del dolor comienza casi de inmediato”, comenta la Dra. Pinto.

¿Qué pasa después de un tratamiento de conducto?

Después de la endodoncia, el diente puede funcionar con normalidad. Es posible sentir una leve sensibilidad durante los primeros días, pero no dolor intenso. En Clínica Aires te entregamos todas las indicaciones para una recuperación cómoda y sin complicaciones.

Pero hay algo fundamental que muchos pacientes desconocen:

La endodoncia no es el último paso.

Tras el tratamiento, es imprescindible realizar una restauración definitiva que puede ser una resina, incrustación o una corona, según el caso. Esta restauración es un tratamiento posterior que permite:

  • Protege el diente, que puede quedar más frágil

  • Restaura su forma, función y estética

  • Previene fracturas o filtraciones futuras

En Clínica Aires, la restauración se realiza con materiales de alta calidad y precisión estética, para que el resultado sea duradero, funcional y armónico con tu sonrisa.

Una solución que vale la pena

El tratamiento de conducto no solo elimina el dolor, también te permite conservar lo más valioso de tu salud dental: tu propio diente.

Con diagnóstico oportuno, técnica precisa y una restauración adecuada, puedes evitar extracciones innecesarias y tratamientos futuros más complejos.

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¿Tienes dudas sobre si este tratamiento es para ti?

Hay 5 señales que pueden ayudarte a saberlo: ¿Cuándo es necesario un tratamiento de conducto?


Contenido revisado por la Dra. Paula Pinto, especialista en Endodoncia.

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